LAS LEYES SOCIALES
- Leyes especialmente en cuestiones civiles: Mishpatim comienza con una serie de leyes que rigen la vida cotidiana, especialmente en cuestiones civiles; Leyes concernientes a los esclavos o sirvientes hebreos; Las injurias personales; La protección de la propiedad; Responsabilidades sociales; Leyes de justicia y de misericordia. Estas leyes son fundamentales para la construcción de una sociedad justa y equitativa. Una de las primeras leyes que se presentan es la sobre la servidumbre hebrea. Un israelita que cayera en pobreza podría venderse como esclavo, pero su servidumbre no debía durar más de seis años. En el séptimo año debía ser liberado. Además, se establece que las mujeres esclavas tenían un estatus diferente y no podían ser tratadas de la misma manera que los hombres.
- Otra serie de Leyes: Leyes sabáticas. Las tres fiestas anuales. El ángel del Hashem. Ratificación del pacto. Aquí se establece el principio de «ojo por ojo, diente por diente», que a menudo se interpreta como una regla de justicia proporcional. Sin embargo, el Talmud explica que este principio se refiere a la compensación económica y no a la venganza literal. Las leyes cubren también el daño causado por animales y la responsabilidad de los dueños de los mismos. Estas leyes detallan las consecuencias para aquellos que causan daño a la propiedad ajena, ya sea de manera accidental o intencionada. Se incluyen regulaciones sobre animales que causan daño, robo, y el daño causado por el fuego. Se abordan delitos como el robo, el fraude y la justicia en el trato con los demás. Las leyes enseñan la importancia de la honestidad y la responsabilidad personal.
- Las tres festividades: Se mencionan las tres festividades principales: Pesaj, Shavuot y Sucot. En esta sección se regulan las ofrendas y sacrificios que deben ser hechos durante estas festividades. Las festividades tienen un papel central en la vida judía, no solo en términos de adoración a Hashem, sino también como momentos de unidad y conexión colectiva. Las leyes que regulan las festividades aseguran que los israelitas no solo celebren, sino que también den gracias y recuerden su historia.
- Ratificación del pacto: Moshé sube al Monte Sinaí para recibir las tablas de la ley, y el pueblo de Israel ratifica el pacto con Hashem. Se realizan sacrificios y se celebra una comida de pacto. Moshé permanece en la montaña por 40 días y 40 noches. La ratificación del pacto marca el compromiso formal entre Hashem y el pueblo de Israel. Esta es la culminación de la relación entre Hashem y el pueblo elegido.
HAFTARÁ
La justicia no es solo un asunto de reglas sociales: Esta palabra de Hashem vino a Yirmeyah: ¿No has notado que esta gente está diciendo: Hashem ha rechazado las dos familias que El escogió? Por tanto, ellos aborrecen a mi pueblo y ya no lo ven como una nación. Aquí está lo que Hashem dice: Si Yo no he establecido mi Pacto con el día y la noche y he fijado las leyes para el firmamento y la tierra, entonces también Yo rechazaré la descendencia de Ya'akov y los de mi siervo David, no escogiendo de su descendencia hombres para reinar sobre la descendencia de Abraham, Yitzjak y Ya'akov. Porque Yo haré que sus cautivos regresen, y Yo les mostraré compasión.
Yirmiyahu [Jeremías] 23:25-26; 34:8-22
La Haftará de Yimeyah refuerza el mensaje de que la desobediencia a estas leyes y el incumplimiento de pactos tiene consecuencias espirituales y sociales graves. También pone de manifiesto el tema de la fidelidad divina, que es constante incluso cuando el pueblo de Israel falla. A pesar de las transgresiones humanas, el pacto de Hashem con Israel sigue siendo firme, y la restauración de Israel será posible cuando el pueblo vuelva a la justicia y cumpla con los principios de la Torá. A través de la Haftará, Yimeyah nos enseña que la justicia no es solo un asunto de reglas sociales, sino un reflejo de nuestra relación con Hashem, que debe ser mantenida con integridad, misericordia y fidelidad.
BRIT JADASHÁ
La ley del talión: Ustedes han oído lo que fue dicho a nuestros padres, “Ojo por ojo y diente por diente”. Pero Yo les digo que no se resistan contra el que les hace el mal. Al contrario, si alguien te pega en la mejilla derecha, deja que te pegue en la izquierda también. Y al que quiera ponerte a pleito por tu camisa, ¡deja que se lleve el saco también. Y si un soldado te obliga a cargar su mochila por una milla, cárgala por dos. Cuando alguien te pida algo, dáselo; cuando alguien quiera algo prestado de ti, préstaselo. Ustedes han oído lo que fue dicho a nuestros padres, Ama a tu prójimo, y odia a tu enemigo. Pero Yo les digo: Amen a sus enemigos; oren por aquellos que los persiguen. Entonces se convertirán en hijitos de su Padre en el cielo. Pues El hace brillar el sol sobre buena y mala gente por igual, y Él manda la lluvia al justo y al injusto por igual. ¿Qué recompensa tienes, si sólo amas a los que te aman? También los cobradores de impuesto hacen eso. Y si son amables sólo con sus amigos; ¿están haciendo algo fuera de lo ordinario? Hasta los Goyim hacen eso. Así que, sean perfectos, como su Padre en el cielo es perfecto.
Mateo 5:21 - 30
La enseñanza de Yeshua sobre la ley del talión no implica la abolición de la justicia o el derecho legítimo a defenderse, sino una llamada a superar la tendencia humana hacia la retribución destructiva. Se nos invita a actuar de manera que reflejemos la gracia divina, perdonando a los demás como Hashem nos ha perdonado. En lugar de buscar retribución, los discípulos y creyentes de Yeshua estamos llamados a mostrar un testimonio de gracia, imitando el carácter de Hashem. La justicia según el Reino de los Cielos, como lo enseña Yeshua, va más allá de una mera aplicación mecánica de la ley y se enfoca en la restauración y el amor hacia el prójimo.