Rosh Jodesh Tevet: Con la ayuda del Eterno, el martes al atardecer comenzamos un nuevo mes: El mes de Tevet. Este mes es el décimo en el conteo de los meses, comenzando desde Nisán. El nombre de Tevet fue adoptado en Babilonia, al igual que los nombres de los otros meses hebreos. En el Rollo de Ester (Capítulo 2) se hace referencia a este mes como “el décimo mes, que es el mes de Tevet”. En este mes cultivamos “la ira correcta”. El Talmud nos enseña que siempre debemos considerar a los demás favorablemente y que la ira es un sentimiento que generalmente debe evitarse. Sin embargo, también existe una ira positiva, relacionada con aquello que debe ser rechazado. El nombre de la tribu asociada a este mes es Dan, que significa “juzgar”. La letra del mes es “ayin”, cuyo significado es “ojo”. Tenemos dos ojos para discernir constantemente qué debemos aceptar en la vida y qué debemos rechazar. En este mes hay tres días que están establecidos como días de ayuno según la tradición judía: El 8 de Tevet: La Torá (Biblia) fue traducida por primera vez a otro idioma, el griego. Este día se considera negativo, ya que es imposible traducirla de manera exacta, lo que puede dar lugar a malentendidos sobre su verdadero significado.
Por este motivo, los justos ayunan en este día. El 9 de Tevet: Fallecieron Ezra el Escriba y Nehemías ben Jaklía. Ellos fueron quienes regresaron con los Iehudím de Babilonia, poniendo fin a esa diáspora y construyendo el Segundo Gran Templo. Este ayuno es observado únicamente por los justos. El 10 de Tevet: El rey Nabucodonosor sitió la ciudad de Jerusalén, durante un periodo de tres años. El sitio culminó con la destrucción de sus murallas el 9 de Tamuz. Por esta razón, el 10 de Tevet fue establecido como un ayuno general para todos. Otra fecha triste para los Iehudím en este mes es el 23 de Tevet. En ese día, los judíos de Portugal fueron expulsados y desterrados, en el año 5277 (1516). Muchos judíos fueron martirizados en las hogueras por negarse a renunciar a su fe, otros huyeron sin poder llevar sus pertenencias, y muchos se convirtieron en “Marranos”, es decir, judíos que públicamente renunciaron a su judaísmo, pero lo seguían practicando en secreto. Es importante destacar que en este mes no hay festividades, excepto en los últimos días de Janucá.
SUEÑOS CON PROPÓSITO
Los sueños de Paró/Faraón que nadie pudo interpretar: Al final de dos años, Faraón tuvo un sueño: él estaba parado junto al Río Nilo; y salieron del río siete vacas, hermosas y gordas; y ellas empezaron a pacer en la hierba del pantano. Después de ellas, salieron del río siete vacas más, que lucían miserables y flacas; y ellas se pararon a la orilla del río junto a las otras vacas. Entonces las vacas que lucían miserables se comieron a las vacas hermosas y gordas. En este punto Faraón se despertó. Pero fue a dormir otra vez y soñó una segunda vez: siete espigas llenas de grano, maduras, crecían en una sola caña. Después de ellas, salieron siete espigas menudas y abatidas por el viento del este. Y las espigas menudas y abatidas por el viento se comieron las espigas llenas y maduras. Entonces Faraón se despertó y se percató que había sido un sueño. En la mañana su alma estaba turbada y mandó a llamar a todos los intérpretes de Mitzrayim y a todos los sabios. Faraón les contó sus sueños, pero nadie allí pudo interpretarlos para él.
Yosef, quien ha sido encarcelado injustamente, es llevado ante Faraón para interpretar su sueño: Entonces el jefe de los coperos le dijo a Faraón: Hoy me recuerda de algo donde estoy en falta: Una noche ambos yo y él tuvimos sueños, y el sueño de cada hombre tenía su propio significado. Allí estaba un joven con nosotros, un hebreo, un sirviente del capitán de la guardia; y nosotros le contamos nuestros sueños, y él los interpretó para nosotros nuestros sueños. Y sucedió como él los había interpretado para nosotros yo fui restaurado a mi cargo, y él fue ahorcado. Entonces Faraón mandó a llamar a Yosef, y ellos lo trajeron deprisa de la mazmorra. Él se rasuró, cambió de ropas, y vino a Faraón. Faraón dijo a Yosef: Tuve un sueño y no hay nadie que lo pueda interpretar; pero he oído que ha sido dicho acerca de ti que cuando tú oyes un sueño, lo puedes interpretar.
Yosef respondió a Faraón: No soy yo, Elohim dará a Faraón una respuesta que pondrá tu mente en Shalom: Después que el Faraón le comento a Yosef sobre los dos sueños, Yosef dijo a Faraón: Los sueños de Faraón son los mismos: Elohim le ha dicho a Faraón lo que Él está por hacer. Esto es lo que dije a Faraón: Elohim ha mostrado a Faraón lo que Él está por hacer. Aquí está: habrá siete años de abundancia por toda la tierra de Mitzrayim; pero después vendrán siete años de hambruna; y Mitzrayim se olvidará de toda la abundancia.
Yosef aconseja al Faraón: Por lo tanto, Faraón debe buscar un hombre que sea ambos discreto y sabio para ponerlo a cargo de la tierra de Mitzrayim. Faraón debe hacer esto, y debe nombrar supervisores sobre la tierra para que reciban impuesto del veinte por ciento sobre los productos de la tierra de Mitzrayim durante los siete años de abundancia. Ellos deben reunir todos los alimentos producidos en estos buenos años que vienen y apartar grano bajo la supervisión de Faraón para ser usado como alimento en las ciudades, y ellos deben almacenarlo.
Yosef se convierte en el segundo al mando de Egipto y se encarga de preparar al país para la hambruna: Faraón dijo a sus oficiales: ¿Podemos encontrar algún otro como él? El Ruaj de Elohim vive en él. Así que Faraón dijo a Yosef: Puesto que Elohim te ha mostrado todo esto, no hay nadie con discernimiento y tan sabio como tú; tú estarás a cargo de mi casa; todo mi pueblo será regido por lo que tú dices. Sólo cuando yo reine desde mi trono, seré yo mayor que tú.
Yosef se casa con Asenat, la hija de un sacerdote egipcio, y tiene dos hijos con ella (Menasheh y Efrayim): Faraón llamó a Yosef por el nombre de Tzafnat-Paneaj y le dio como esposa a Osnat la hija de Poti-Fera sacerdote de On. Dos hijos le nacieron a Yosef antes que el año de hambruna viniera; Osnat la hija de Poti-Fera sacerdote de On los dio a luz para él. Yosef llamó al primogénito Menasheh (causando a olvidar), Porque Elohim me ha causado que olvidé todas las aflicciones que sufrí a las manos de mi familia. Al segundo él llamó Efrayim (fruto), Porque Elohim me ha hecho fructífero en la tierra de mi desgracia.
Los hermanos de Yosef son enviados por Iaacov a Egipto en busca de comida y se encuentran con Yosef, quien los reconoce de inmediato: Iaacov vio que había provisiones en Egipto. Entonces Iaacov les dijo a sus hijos: ¿Por qué Uds. se hacen notar? Y dijo: Miren, escuché que hay provisiones en Egipto. Desciendan allí y compren para nosotros de allí, para que vivamos y no muramos. Los hermanos de Yosef, diez de ellos, descendieron a comprar cereal en Egipto. Yosef pone a prueba a sus hermanos para ver si han cambiado y si están dispuestos a perdonar y olvidar el pasado. Los hermanos de Yosef se arrepienten de su comportamiento pasado y se comprometen a cuidar a Biniamín/Benjamín, el hermano menor de Yosef.
Los hermanos de Yosef vuelven a Egipto con Biniamín: Entonces Iehudá/Judá le dijo a su padre: Por favor, envía al joven conmigo. Nos levantaremos e iremos para que vivamos y no muramos, tanto nosotros como tú y nuestros niños. Yo respondo por él, de mi mano lo demandarás. Si no te lo volviese a traer y lo parase a él ante ti, estaría pecando contra ti por siempre. Si no nos hubiéramos demorado, ya habríamos vuelto dos veces.
Yosef reconoce a Biniamín: Yosef al ver a Biniamín no puede controlar su emoción y sale del recinto y llora. Yosef prueba a sus hermanos, poniendo su copa en el saco de Biniamín, Iehudá toma el lugar de Biniamín Los hermanos de Yosef reconocen que habían hecho mal, cuando vendieron a Yosef como esclavo y esto era consecuencia, por lo que se arrepintieron.
¿Qué enseñanza nos deja la parashá? La importancia de la interpretación y la sabiduría divina: La verdadera sabiduría proviene de la conexión con lo divino, como lo mostró Yosef al interpretar los sueños de Faraón con la ayuda de Hashem. Esto nos enseña a buscar la guía divina en momentos difíciles. La preparación ante la abundancia y escasez: Yosef aconsejó almacenar alimentos durante los años de abundancia para enfrentar los de escasez. Esta lección nos enseña la importancia de prepararnos para tiempos difíciles, tanto a nivel material como espiritual. El perdón y la reconciliación: La historia de Yosef y sus hermanos muestra el poder del perdón y la importancia de la humildad y el arrepentimiento. Perdonar restaura relaciones y libera tanto al que perdona como al perdonado. El crecimiento a través de las dificultades: Las pruebas de Yosef fueron oportunidades para crecer y desarrollarse en sabiduría y liderazgo. Las dificultades pueden ser transformadoras y enseñarnos lecciones valiosas. La fe en el propósito divino: Yosef mantuvo su fe en Hashem, reconociendo que sus experiencias formaban parte de un plan divino más grande. Nos enseña a confiar en que nuestras vidas tienen un propósito, incluso en tiempos de incertidumbre. El poder de la humildad: A pesar de su alto estatus, Yosef mantuvo la humildad, reconociendo que su habilidad provenía de Hashem. La humildad nos permite ser instrumentos de bien y tener una influencia positiva en el mundo, el cual debemos de ejecutar en nuestra vida cotidiana.
HAFTARÁ
El candelabro (La Menorá) de oro y los dos olivos: Entonces el malaj que estaba hablando conmigo regresó y me despertó, como un hombre que es despertado de su sueño, y me preguntó: ¿Qué ves tú? Yo respondí: He estado mirando a una menorah; es toda de oro, con un tazón encima, en él siete lámparas, y siete tubos que llegan a la parte superior de las lámparas. Al lado de él hay dos árboles de olivo, uno a la derecha del tazón y el otro a la izquierda.
Zejaryah (Zacarías) 2:14 - 4:7
En otra visión, Zacarías ve un candelabro (Menorá) de oro con siete lámparas y dos olivos a su lado. Los olivos, que representan la fuente de aceite para las lámparas, simbolizan la provisión divina. Zacarías pregunta sobre el significado de estos elementos, y el ángel le explica que la Menorá y las lámparas representan la palabra del Eterno que saldrá de Jerusalén, mientras que el aceite de los olivos simboliza la unción divina. Finalmente, el ángel le revela que el gran monte de piedra frente a Zorobabel se convertirá en una llanura, lo que simboliza la eliminación de obstáculos para la reconstrucción del Templo.
BRIT JADASHÁ
Ahora bien, los Patriarcas tuvieron celos de Yosef, y lo vendieron para esclavitud en Mitzrayim. Pero Hashem estaba con él; Él le rescató de todas sus tribulaciones y le dio sabiduría y gozó del favor de Faraón, rey de Mitzrayim, el cual lo nombró gobernador supremo sobre Mitzrayim y sobre toda su casa. Sobrevino una hambruna que causó mucho sufrimiento por todo Mitzrayim y Kenaan; Pero cuando Ya'akov oyó que había grano en Mitzrayim, mandó a nuestros padres allí la primera vez. La segunda vez, Yosef reveló su identidad a sus hermanos, y la familia de Yosef fue dada a conocer a Faraón.
Hechos 7:9 - 16
. En otra visión, Zacarías ve un candelabro (Menorá) de oro con siete lámparas y dos olivos a su lado. Los olivos, que representan la fuente de aceite para las lámparas, simbolizan la provisión divina. Zacarías pregunta sobre el significado de estos elementos, y el ángel le explica que la Menorá y las lámparas representan la palabra del Eterno que saldrá de Jerusalén, mientras que el aceite de los olivos simboliza la unción divina. Finalmente, el ángel le revela que el gran monte de piedra frente a Zorobabel se convertirá en una llanura, lo que simboliza la eliminación de obstáculos para la reconstrucción del Templo.