UNA DESCENDENCIA INCONTABLE
Hashem le dijo a Abram: “Vete para ti de tu tierra, de tu patria y de la casa de tu padre, a la tierra que te mostraré”. [O sea, asume el desafío, libérate de todo aquello que te mantiene atado, y accede a un nivel espiritual superior]. [“Vete para ti”: para tu propio beneficio]. “Haré de ti una gran nación, te bendeciré, engrandeceré tu nombre y serás una bendición. Bendeciré a quienes te bendigan y al que te maldiga Yo maldeciré. Serán bendecidas a través de ti todas las familias de la tierra.” Abram partió como le había dicho Hashem, y Lot fue con él. Abram tenía 75 años cuando salió de Jarán. Abram tomó a su esposa Sarai y a su sobrino Lot, con todos los bienes que juntaron y todas las almas que hicieron en Jarán y salieron hacia la tierra de Kenaan [Canaán]. Y llegaron a la tierra de Kenaan.
Bereshit [Génesis] 12:5
- Abraham Avinu es conocido como Ha Ivrí, el hebreo, que significa «el que cruzó al otro lado». El cruzó al otro lado, pasando de ser un idólatra a ser un siervo del DI-s viviente. La palabra Ivrí, hebreo, viene original y lingüísticamente del nombre Ever (Heber), quien fue el nieto de Shem (Gen 10:21). Ever significa literalmente “más allá” o “del otro lado”. La tradición asocia esto y, posteriormente el nombramiento de Abraham como un Ivrí con “el otro lado” del río Éufrates. La región de Mesopotamia de donde vinieron nuestros patriarcas a la tierra prometida. En un sentido espiritual, el cruzar “al otro lado” tiene que ver con dejar la vida de esclavitud, a una vida al servicio de Hashem.
- Hashem le promete a Abram una nación: A Abram le llegó el llamado divino para que abandonara Jarán y se encaminara a otra tierra que Hashem le indicaría. Abram se trasladó por fe de Ur a Harán y finalmente a Canaán (Eretz Israel), llevando consigo a su esposa Sarai, su sobrino Lot, y todas sus posesiones. Entonces Hashem estableció un pacto con Abram, y le dijo que sería el fundador de una gran nación. No sólo esta gran nación sería bendecida, dijo Hashem, sino también las demás naciones del mundo serían bendecidas a través de los descendientes de Abram. Y paso Abram por aquella tierra hasta llegar a a ciudad de Sh’jem/Siquem, donde Hashem se le apareció a Abram en una visión y afirmó Su promesa de que algún día la tierra Kenaan pertenecería a sus descendientes. Abram construyó un mizbéaj (altar) en acción de gracias al Eterno, e invocó el nombre del Eterno. Hubo entonces hambre en la tierra, y descendió Abram a Egipto. Temiendo que los egipcios se sintieran atraídos por su esposa Sarai y lo asesinaran para apoderarse de ella, (“Mira, ahora sé que eres una mujer hermosa”). Al acercarse a la tierra de Egipto le pidió que les dijera que era su hermana. Cuando arribaron a ese país la belleza de Sarai despertó gran admiración y fue llevada al palacio de Paró (faraón). De inmediato, Abram fue colmado de regalos de rebaños y sirvientes. Mas Hashem hirió a Paró y su familia con severas plagas por causa de Sarai. Entonces Paró llamó a Abram, y le dijo: ¿Qué es esto que has hecho conmigo? ¿Por qué no me declaraste que era tu mujer? Paro pidió a Abram que abandonara Egipto junto con su familia y sus bienes, y Abram así lo hizo. Y Abram era riquísimo en ganado, en plata y en oro. Abram procedió con sus viajes desde el sur hasta Bet-El, hasta el lugar donde había estado su tienda originalmente, entre Bet El y Ay/Haí, hacia el lugar del altar que había erigido allí anteriormente. Allí, Abram invocó el Nombre de Hashem. Y también Lot, que acompañaba a Abram, tenía ganado ovino, bovino y tiendas.
- Abram y Lot se separan: La tierra no podía producir lo suficiente para que habitasen a la par: la hacienda de ellos era tanta que no podían habitar juntos. Entonces se generó una fricción entre los pastores de ganado de Abram y los pastores de Lot. Dijo Abram a Lot: no haya altercados entre mis pastores y tus pastores, porque somos hermanos. ¿Acaso no tienes toda la tierra ante ti? Por favor, sepárate de mí, si tú vas a la izquierda yo iré a la derecha, y si vas a la derecha yo iré a la izquierda. Lot alzó sus ojos y vio toda la llanura del Iardén (Jordán), que era de abundante agua: antes de que Hashem destruyera Sedom y Amorá (Sodoma y Gomorra) era como el Jardín de Hashem (como el Gan Eden, por sus árboles), (y tan rica en legumbres) como la tierra de Egipto hasta Tzoar, ciudad ubicada al sur del Mar Muerto. O más precisamente, una antigua ciudad egipcia de la frontera.) 11Lot eligió para sí toda la planicie del Iardén. Lot se fue hacia el este. Y así, se despidieron uno del otro. Abram se estableció en la tierra de Kenaan y Lot se estableció en las ciudades de la planicie (o sea en Sedom y los suburbios), instalando sus tiendas hasta Sedom.
- Abram rescata a Lot: Cuando Abram se enteró de que su pariente había sido tomado prisionero, armó a sus criados que habían nacido en su casa,318 hombres y los persiguió hasta Dan.
Después de estos sucesos, la palabra de Hashem se presentó a Abram en una visión, diciéndole: “¡No temas Abram! Yo soy para ti un escudo, tu recompensa es muy grande”. Dijo Abram: “mi Señor, HaShem, ¿(De qué me vale todo lo) que puedas darme si no tengo hijos? ¡El mayordomo de mi casa es Eliézer de Damesek (Damasco)!” Dijo Abram: “Mira, no me has dado descendencia ¡y un criado de mi casa me heredará!”. Repentinamente, la palabra de Hashem se reveló a él, diciéndole: “¡No te heredará él, sino un producto de tu mismo cuerpo te heredará!”. Entonces Elohim lo sacó afuera y le dijo: “Mira, por favor, hacia el cielo, y cuenta las estrellas, si es que las puedes contar”. Y le dijo: “Así será tu descendencia” Ver. Dev. 1:10
Bereshit [Génesis] 15:1
- El pacto entre las partes: Abram preguntó: ¿Cómo sabré que poseo esta tierra? Y Hashem selló, entonces, un pacto con él, conocido como Brit bein hab’tarim (pacto entre las mitades). Hashem le informó luego que sus descendientes serían esclavizados temporariamente en tierra extraña, pero que saldrían de ella con gran riqueza.
- Hagar/Agar e Ishmael/Ismael: Como no tenía hijos, Sarai sugirió a Abram que tomara a su sierva Hagar como segunda esposa. Cuando Hagar advirtió que estaba en cinta le perdió el respeto a Sarai. Esta se sintió muy molesta y se quejó a Abram. El patriarca devolvió a Sarai su autoridad sobre Hagar. Después, Sarai tuvo que lidiar duramente con la sierva, que terminó huyendo. Un ángel de Hashem apareció ante Hagar y le dijo que regresara, prometiéndole que el hijo que tendría, Ishmael, sería el fundador de una gran nación. Abram, tiene como significado ‘Padre Exaltado’, cuando Abram llegó a la edad de noventa y nueve años Hashem renovó Su pacto con él y cambió su nombre por el de Abraham, que significa ‘padre de una multitud de naciones o padre de enaltecido’.
- Abraham se circuncida: “Será una señal de mi pacto con ustedes”. El Eterno ordena a Abraham, circuncidar el prepucio de todo varón a partir de ese momento como señal que que él y su descendencia guardarán el pacto. A partir de allí se establece que todo varón sea circuncidado ocho días después de nacer y se reafirma en Vaikrá [Levítico] 12:3 en las leyes de pureza ritual en mujeres con parto reciente. Hashem dijo también a Abraham que a partir de entonces no llamaría a su esposa Sarai [mi Princesa] sería conocida tan solo como Sará, que significa «princesa». Abraham cumplió prontamente la mitzvá de la brit milá (circuncisión) tanto él como con su hijo Ishmael y todos los varones de su casa, incluso los extranjeros comprados.
- La parashá Lej Lejá como la anterior Nóaj contiene algunas similitudes entre la vida de Nóaj y la de Abraham veamos:
- Nóaj fue la décima generación después de Adám. Abraham es la décima generación después de Nóaj.
- Tanto Nóaj como Abraham obedecieron en completa sumisión, sin cuestionar la Palabra del Elohim de Israel.
- Estos dos avadim [siervos] edificaron mitzbejot (altares) a Elohim (Dios) como demostración de absoluta entrega y sometimiento a Su voluntad, de adoración, de gratitud por Su incomparable fidelidad y cumplimiento de Sus promesas.
- Con ambos, Hashem hizo pactos o alianzas.
- Cumplieron los propósitos y llamados del Creador para sus vidas.
- Los dos fueron varones casados y padres de familia.
- Rabí Menajem Mendel de Kotzk comenta: El viaje esencial que una persona tiene que hacer en este mundo es hacia sí mismo, hacia su esencia. Eso es todo el propósito de estar en el mundo. Quizás por esta razón las palabras para ir [Lej] y a ti mismo [Lejá], son escritas con letras idénticas, para decirnos que el viaje esencial es el viaje del alma hacia la fuente de la vida, y a la inversa, hacerse a uno mismo requiere movimiento, para ser uno mismo, uno tiene que ir a su esencia misma que está ligada con el Creador”
HAFTARÁ
לָ֤מָּה תֹאמַר֙ יַֽעֲקֹ֔ב וּתְדַבֵּ֖ר יִשְׂרָאֵ֑ל נִסְתְּרָ֤ה דַרְכִּי֙ מֵיְהֹוָ֔ה וּמֵאֱלֹהַ֖י מִשְׁפָּטִ֥י יַעֲבֽוֹר׃ הֲל֨וֹא יָדַ֜עְתָּ אִם־לֹ֣א שָׁמַ֗עְתָּ אֱלֹהֵ֨י עוֹלָ֤ם ׀ יְהֹוָה֙ בּוֹרֵא֙ קְצ֣וֹת הָאָ֔רֶץ לֹ֥א יִיעַ֖ף וְלֹ֣א יִיגָ֑ע אֵ֥ין חֵ֖קֶר לִתְבוּנָתֽוֹ׃ נֹתֵ֥ן לַיָּעֵ֖ף כֹּ֑חַ וּלְאֵ֥ין אוֹנִ֖ים עׇצְמָ֥ה יַרְבֶּֽה׃ וְיִעֲפ֥וּ נְעָרִ֖ים וְיִגָ֑עוּ וּבַחוּרִ֖ים כָּשׁ֥וֹל יִכָּשֵֽׁלוּ׃
"¿Por qué dices, oh Iaakov, y hablas, oh Israel: ‘Mi camino está escondido del Eterno, y mi derecho ha pasado de mi Dios’? ¿No lo has sabido? ¿No has oído que el Dios Eterno, el Señor, Creador de los confines de la tierra, no desmaya ni se cansa? Su discernimiento está más allá de toda búsqueda. Él da poder al débil; y al que no tiene fuerzas, le aumentará las fuerzas. Incluso los jóvenes desmayarán y se cansarán, y los jóvenes caerán por completo; Pero los que esperan en el Eterno renovarán sus fuerzas; levantarán alas como las águilas; correrán y no se cansarán; caminarán y no se desmayarán."Yeshayahu [Isaías] 40:27 - 30
וְאַתָּה֙ יִשְׂרָאֵ֣ל עַבְדִּ֔י יַעֲקֹ֖ב אֲשֶׁ֣ר בְּחַרְתִּ֑יךָ זֶ֖רַע אַבְרָהָ֥ם אֹהֲבִֽי׃ אֲשֶׁ֤ר הֶחֱזַקְתִּ֙יךָ֙ מִקְצ֣וֹת הָאָ֔רֶץ וּמֵאֲצִילֶ֖יהָ קְרָאתִ֑יךָ וָאֹ֤מַר לְךָ֙ עַבְדִּי־אַ֔תָּה בְּחַרְתִּ֖יךָ וְלֹ֥א מְאַסְתִּֽיךָ׃ אַל־תִּירָא֙ כִּ֣י עִמְּךָ־אָ֔נִי אַל־תִּשְׁתָּ֖ע כִּֽי־אֲנִ֣י אֱלֹהֶ֑יךָ אִמַּצְתִּ֙יךָ֙ אַף־עֲזַרְתִּ֔יךָ אַף־תְּמַכְתִּ֖יךָ בִּימִ֥ין צִדְקִֽי׃
"Pero tú, Israel, siervo mío, Jacob, a quien he escogido, descendiente de Abraham, mi amigo; tú, a quien tomé de los confines de la tierra, y desde sus lugares más remotos te llamé, y te dije: Mi siervo eres tú; yo te he escogido y no te he rechazado: No temas, porque yo estoy contigo; no te desalientes, porque yo soy tu Dios. Te fortaleceré, ciertamente te ayudaré, sí, te sostendré con la diestra de mi justicia. "Yeshayahu [Isaías] 41:8 - 10
BRIT HADASHÁ
Y el sumo sacerdote dijo: ¿Es esto así? Y él dijo: Escuchadme, hermanos y padres. El Elohim de gloria apareció a nuestro padre Abraham cuando estaba en Mesopotamia, antes que habitara en Harán, y le dijo: “Sal de tu tierra y de tu parentela, y ve a la tierra que yo te mostraré”. Entonces él salió de la tierra de los caldeos y se radicó en Harán. Y de allí, después de la muerte de su padre, Elohim lo trasladó a esta tierra en la cual ahora vosotros habitáis. No le dio en ella heredad, ni siquiera la medida de la planta del pie, y sin embargo, aunque no tenía hijo, prometió que se la daría en posesión a Él y a su descendencia después de Él. Y Elohim dijo así: “Que sus descendientes serían extranjeros en una tierra extraña, y que serían esclavizados y maltratados por cuatrocientos años. Pero yo mismo juzgaré a cualquier nación de la cual sean esclavos” dijo Elohim “y después de eso saldrán y me servirán en este lugar”. Y Elohim le dio el pacto de la circuncisión; y así Abraham vino a ser el padre de Isaac, y lo circuncidó al octavo día; e Isaac vino a ser el padre de Jacob, y Jacob de los doce patriarcas.
Hechos 7:1 - 8
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REFLEXIÓN DE LA PARASHÁ
- Por el camino de la filistea los israelitas podían llegar a Canaán, caminando normalmente, en once días, pero viendo el Eterno que no estaban preparados para constituir un pueblo bien disciplinado, con sus leyes y estatutos, les guio por un camino opuesto, a fin de entrenarles espiritualmente
antes de ocupar la Tierra Prometida. - El Cántico contiene: (a) Una alabanza general al Eterno Di-s, por ser el Poderoso Salvador, tanto nuestro como de nuestros
antepasados, ante quien nada ni nadie puede resistirse; (b) un repaso de los milagros que acompañaron la partición del mar; (c) el plan que el Faraón tuvo en mente al perseguir a la nación y el rotundo fracaso de sus designios; (d) la reacción de los cananeos y demás naciones ante el milagro y lo que este presagiaba para ellos y,
finalmente, (e) el futuro de Israel como la nación del Eterno Di-s en Éretz Israel. - Mirando la parashá desde la óptica espiritual, el Eterno nos está enseñando, a desarrollar la EMUNA, LA FE.
- En Eterno en el salmo 91 nos da un cuadro de toda su protección para nosotros
- Él es nuestro refugio, nuestra fortaleza, nuestro protector, es fiel no importando nuestra circunstancia, está presente en momentos BUENOS, y en momentos NO TAN BUENOS,
- El Eterno nos esta recordando que él nunca nos a desamparado, que nunca nos ha dejado, ni nunca nos dejara; Nos dice: No te dejo, no te dejara, no te abandonare; Mas bien nosotros somos los que nos salimos de los parámetros del Eterno, cuando desobedecemos sus mandamientos y estatutos.
- Decimos obedecer y guardar, pero algunas veces hacemos caso omiso a cumplir a cabalidad la Torá/La Biblia.
- Él nos protege de día y de noche, como protegió a nuestro pueblo en el desierto; Hashem es el mismo ayer, hoy y por los siglos.
- La provisión del maná era diaria, no semanal ni mensual, porque el Eterno quería enseñarle a su pueblo (y a nosotros hoy) que, más allá del alimento físico, la mayor necesidad que tiene el hombre en esta vida, en medio del desierto, en medio de las dificultades, es una relación íntima que dependa de Él.
- ¡Necesitamos saber que Él es el Señor, y debemos conocer que Él es nuestro Elohim!, nuestro proveedor.
- A pesar de todas las indicaciones que el Eterno les dio, muchos fueron tercos, y desobedecieron desafiando las órdenes del Eterno y salieron el séptimo día a recoger alimentos, pero no les cayo nada. Igual nos pasa hoy en día, decimos obedecer al Eterno, decimos cumplir con sus mandamientos, pero muchas veces en el día de reposo, lo aprovechamos para hacer cosas que por estar trabajando no podemos hacer.
- Que el Eterno nos ayude a
verdaderamente obedecerle,
ya que es para nuestro propio
beneficio