UN SALTO DE FE
- Breve resumen de la parashá: La parashá comienzo de la historia de Abram y la elección de Israel como pueblo del Eterno. Luego describe la separación de Abram y Lot y la promesa de Hashem a Abram. Vemos el episodio de la guerra de los reyes y el rescate de Lot por parte de Abram. Continua con la promesa de Hashem a Abram prometiéndole que será padre de una gran nación. También describe la historia de Hagar y el nacimiento de Yishmael. Y la parashá cierra con el Brit/Pacto de la Brit Milá (el pacto de la circuncisión).
- Llamamiento de Abram: Hashem le dijo a Abram: Vete para ti (Vete por ti, sal de ti, de ti porque te conviene, deja todo) de tu tierra, de tu patria y de la casa de tu padre, a la tierra que te mostraré. Hashem le ordena a Abram (más tarde llamado Abraham) que deje su hogar, familia y tierra natal para ir a la tierra que Él le mostrará.
- Promesa y Bendición: Haré de ti (Abram) una gran nación, te bendeciré, engrandeceré tu nombre y serás una bendición. (Hashem prometió bendecir a Abram y hacerlo grande. Pero había una condición, Abram tenía que obedecer a Hashem. Tendría que dejar su hogar y su familia y viajar a una tierra nueva). Bendeciré a quienes te bendigan y al que te maldiga Yo maldeciré. Serán bendecidas a través de ti todas las familias de la tierra.
- Abram sale hacia a Kenaan: Abram (obedeció) partió como le había dicho Hashem, y Lot fue con él. Abram tenía 75 años cuando salió de Jarán. Abram tomó a su esposa Sarai (más tarde llamada Sara) y a su sobrino Lot, con todos los bienes que juntaron y todas las almas que hicieron en Jarán y salieron hacia la tierra de Kenaan. La importancia de la emuna y la obediencia de Abram.
- Abram en Egipto: En ese entonces hubo tanta hambre en aquella región que Abram se fue a vivir a Egipto. Cuando estaba por entrar a Egipto, dijo a su esposa Sarai: Yo sé que eres una mujer muy hermosa. Estoy seguro de que en cuanto te vean los egipcios dirán: “Es su esposa”; entonces a mí me matarán, pero a ti te dejarán con vida. Por favor, di que eres mi hermana para que gracias a ti me vaya bien y me dejen con vida. Abram baja a Egipto debido a la hambruna que había en la tierra.
- Abram y Lot se separan: Abram subió de Mitzrayim. él, su esposa y todo lo que él tenía, y Lot con él al Neguev. Abram se hizo rico, con mucho ganado, plata y oro. Mientras iba en sus viajes por el Neguev, llegó a Beit-El, al lugar donde su tienda había estado al principio, entre Beit-El y Ai. Lot, que estaba viajando con Abram, también tenía rebaños, manadas y tiendas. Pero la tierra no era suficientemente grande para ellos vivir juntos, porque sus posesiones eran muy grandes y no podían habitar juntos. Además, se levantaron peleas entre los pastores de Abram y los de Lot. Abram dijo a Lot: Por favor, vamos a no tener peleas entre tú y yo, o entre mis pastores y los tuyos, puesto que somos parientes. ¿No está toda la tierra delante de ti? Por favor sepárate de mí, si tú vas a la izquierda, yo iré a la derecha; si tú vas a la derecha, yo iré a la izquierda.
- Lot prisionero, Abram lo rescata: Ahora bien, el Valle de Siddim estaba lleno de pozos de asfalto, y cuando los reyes de Sedom y Amora huyeron, algunos cayeron en ellos; mientras el resto huyó a las montañas. Los victoriosos tomaron toda la caballería de Sedom y Amora y todas sus provisiones, entonces se fueron. Pero mientras se iban, ellos tomaron a Lot, el hijo del hermano de Abram, y sus posesiones; puesto que él vivía en Sedom. Alguien que había escapado vino y se lo dijo a Abram el Hebreo, que estaba viviendo junto a los Cedros de Mamre el Emori, hermano de Eshjol y hermano de Aner; todos ellos aliados de Abram. Cuando Abram oyó que Lot su hermano había sido llevado cautivo, él numeró a sus sirvientes que habían nacido en su casa, 318 de ellos, y fue en persecución hasta Dan.
- El Brit/Pacto de Hashem con Abram. Hashem promete a Abram un hijo: Algún tiempo después la palabra de Hashem vino a Abram en una visión, diciendo: No temas, Abram. Yo te escudo; tu recompensa será muy grande. Abram respondió: Hashem Elohim ¿de qué me sirven tus dones a mí si permanezco sin hijo, pero el hijo de Mazer la esclava nacida en mi casa, este Eliezer de Dammesek hereda mis posesiones? Tú no me has dado zera/Simiente, Abram continuó, así que alguien nacido en mi casa será mi heredero. Pero la palabra de Hashem vino a él: Este hombre no será tu heredero. No, tu heredero será un hijo de tu propio cuerpo. Entonces Él lo llevó afuera, y le dijo: Mira al firmamento, y cuenta las estrellas, si tú las puedes contar, Tu zera/Simiente será tan numerosa. Abram creyó en La Palabra de Hashem, y Él se lo acreditó a como justificación. Hashem le dijo a él: Yo soy Hashem, quien te sacó de la tierra de los Kasdim para darte esta tierra para que la heredes.
- Hagar engendra un hijo de Abram (Yishmael): Ahora bien, Sarai la esposa de Abram no le había dado hijos. Pero ella tenía una esclava Mitzrayimi llamada Hagar; así que Sarai dijo a Abram: Mira, Hashem no me ha permitido tener hijos; ve y duerme con mi esclava. Quizá yo podré tener hijos por medio de ella. Abram escuchó lo que Sarai dijo. Fue cuando Abram había vivido diez años en la tierra de Kenaan que Sarai la esposa de Abram tomó a Hagar la Mitzrayimi, su esclava, y la dio a Abram su esposo para ser su esposa. Abram tuvo relaciones sexuales con Hagar, y ella concibió, pero cuando ella se percató que estaba preñada, ella miraba a su señora con desprecio.
- Hagar e Yishmael huyen: Sarai dijo a Abram: Este ultraje que se está haciendo conmigo es tu culpa. Verdad es, que yo te di mi esclava para que durmieras con ella; pero cuando ella vio que estaba preñada, ella comenzó a despreciarme. Que Hashem decida quién está en lo correcto, yo o tú. Sin embargo, Abram respondió a Sarai: Mira, ella es tu esclava. Trata con ella como tú creas correcto. Entonces Sarai la trató tan bruscamente que ella huyó de su presencia.
- Yishmael recibe una promesa de parte del Malaj de Hashem: El Malaj de Hashem la encontró junto a una fuente en el desierto, la fuente en el camino a Shur, y dijo: Hagar, La esclava de Sarai ¿De dónde has venido y a dónde vas? Ella respondió: Estoy huyendo de mi señora Sarai. El Malaj de Hashem le dijo a ella: Regresa a tu señora, y sométete a su autoridad. El Malaj de Hashem le dijo a ella: Yo grandemente aumentaré tu zera/Simiente; habrá tantos que será imposible contarlos. El Malaj de Hashem le dijo a ella: Mira, estás preñada y darás a luz un hijo. Lo llamarás Yishmael (Elohim presta atención) porque Hashem ha prestado atención a tu miseria. El será un hombre salvaje, con su mano contra todos, y la mano de todos contra él, viviendo su vida en desavenencia con todos sus parientes.
- Abram se circuncida y el Eterno le cambia el nombre: Cuando Abram tenía 99 años, Hashem se reveló ante Abram y le dijo: Yo soy É-l Sha-dai (Tu Protector). Camina ante Mí y sé íntegro. Pondré Mi pacto entre tú y Yo, e incrementaré mucho tu descendencia. Entonces Abram cayó sobre su rostro, por temor reverencial ante la Divina Presencia y Elohim se dirigió a él diciendo: En cuanto a Mí, éste es Mi pacto contigo: serás padre de una multitud de naciones. Tu nombre no será más Abram, sino Abraham será tu nombre, porque te he hecho padre de una multitud de naciones. La Parashá Lej Lejá nos enseña que la fe y la obediencia son fundamentales en nuestra relación con Hashem. Al reflexionar sobre la historia de Abraham, podemos profundizar nuestra fe y comprometernos a seguir al Eterno con obediencia y confianza. Y algo muy importante salir de nuestra zona de confort y ser obedientes al Eterno.
HAFTARÁ
Hashem conoce las dificultades y problemas de Su pueblo: ¿Por qué te quejas, Ya'akov; por qué dices, Yisra'el: Mi senda está escondida de Hashem, mis derechos son ignorados por Elohim?¿No han sabido, no han oído que El Elohim eterno, Hashem, el creador de los confines de la tierra, no se cansa ni se fatiga? Su entendimiento no puede ser penetrado. El da vigor al exhausto, El da fuerza al que está sin energía. Los hombres jóvenes se cansan y se fatigan, aun los más capaces pueden tropezar y caer; pero aquellos que esperan en Hashem renovarán su fuerza, ellos volarán en lo alto como si con alas de águila; cuando estén corriendo no se fatigarán, cuando estén caminando no se cansarán.
La Haftará nos recuerda que somos un pueblo elegido por Hashem y que tenemos una responsabilidad especial de seguir sus mandamientos y promover la justicia y la compasión en el mundo. Que Hashem está siempre con nosotros, incluso en momentos de dificultad y exilio. Que Hashem es justo y que hará justicia en el mundo. Que la fe es fundamental para superar los desafíos y dificultades que la vida nos presenta.
BRIT HADASHÁ
Abraham un hombre de Emuna/fe: Por la confianza Abraham obedeció después de que fue llamado a salir al lugar que Hashem le daría como posesión; en verdad, salió sin saber adónde iba. Por la confianza vivió como residente temporal en La Tierra de la promesa, como si no fuera de él, viviendo en tiendas con Yitzjak y Yaakov, quienes iban a recibir lo que había sido prometido a él. Porque estaba aguardando esperanzado la ciudad que tiene fundamentos permanentes, de la cual el arquitecto y constructor es Hashem. Por la confianza él recibió potencia para engendrar un hijo, aunque su edad para eso ya le había pasado, y así también estaba la misma Sarah; porque creyó que el que lo había prometido era digno de confianza. Por lo cual, este hombre que estaba virtualmente muerto engendró zera (simiente, generación), tan numerosos como las estrellas del firmamento, e incontables como los gramos de arena en la orilla del mar.
La obediencia es primordial para que nuestra vida tenga shalom. No permitamos que la duda y la incredulidad nos atrapen en momentos de dificultad. Fortalezcamos nuestra fe a través del estudio y obedecimiento a la Torá.