LA ELECCIÓN CORRECTA
- La Bejira (elección) o Libre albedrío: Mira, hoy presento ante ustedes la bendición y la maldición. La bendición, si obedecen los mandamientos de Hashem, su Elohim, que yo les ordeno hoy. Y la maldición, si no obedecen los mandamientos de Hashem, su Elohim, y se apartan del sendero que yo les prescribo hoy siguiendo a ídolos de otros, de los que jamás supieron. Cuando Hashem tu Elohim te introduzca en la tierra a la que te diriges para tomar en posesión, ubicarás a los que bendicen mirando hacia el monte Guerizim, y a los que maldicen los ubicarás mirando hacia el monte Eval. Esos montes se encuentran del otro lado del Iardén, lejos, hacia el oeste, en la tierra de los kenaanitas que habitan en la Aravá, frente al Guilgal, junto a las Planicies de Moré. Ustedes están próximos a cruzar el Iardén para conquistar la tierra que Hashem, su Elohim, les da. Ustedes la tomarán en posesión y se establecerán en ella. Sean cuidadosos en cumplir todos los decretos y las leyes que hoy presento ante Ustedes. Bejira: La palabra «Bejira» proviene de la raíz hebrea «bachar», que significa «elegir» o «seleccionar».
- Bejira Justa (libre elección): Es un término hebreo que se refiere al concepto de «libre albedrío» o «elección libre». La palabra «Bejira» significa «elección» y «Jusra» significa «libre» o «voluntaria». En la tradición hebrea, «Bejira Jusra» se refiere a la capacidad humana de elegir entre diferentes opciones sin coacción externa, es decir, la libertad de decidir según la propia voluntad. Implica la libertad de decidir y la responsabilidad por las consecuencias de esas decisiones. Este concepto es fundamental en la relación entre Hashem y el ser humano, ya que implica que los seres humanos son responsables de sus acciones y elecciones. Una persona es libre de escoger sin nada que la forcé hacia un lado o hacia otro. La educación juega parte importante en la determinación del punto de bejira de uno. Una persona puede haber sido educada para realizar en forma natural muchas buenas acciones. Esto significa que su punto de bejirá está un nivel alto. Otra persona puede haber sido educado entre malvados de la peor familia, entre ladrones y asaltantes. Esto significa que su punto de bejira está un nivel bajo. La tradición hebrea también enseña que los seres humanos pueden arrepentirse de sus malas acciones y volver a elegir el camino correcto.
- Leyes para una adoración verdadera: Éstos son los decretos y las leyes que deberán poner cuidado en cumplir en el territorio que Hashem, Elohim de tus patriarcas, te entrega para que lo poseas todo el tiempo que se prolongue la vida de Ustedes sobre la tierra: Derriben por completo los ídolos, en todo lugar donde las naciones que están por expulsar hicieron idolatría, en los altos montes, en las colinas y bajo los árboles frondosos. Hagan trizas sus altares, hagan pedazos los monumentos y quemen a fuego sus árboles asherá (de idolatría). Derriben también las imágenes grabadas de sus dioses y borren por completo sus nombres de aquel lugar. A Hashem, Elohim de Ustedes, no deben adorarlo de esa manera, sólo podrán adorarlo en el lugar que Hashem, Elohim de Ustedes, elija de entre todas las tribus para establecer allí Su Nombre. Es allí adonde deberán ir Ustedes buscando Su Presencia.
- Hashem promete a Israel la construcción del Gran Templo: Habrá un lugar que Hashem, tu Elohim, escogerá para hacer reposar en él Su Nombre. Allí al Gran Templo de Ierushaláim deberán llevar todo lo que yo les ordeno: sus ofrendas Olá, sus ofrendas Shelamim (de paz), sus diezmos, la ofrenda Terumá de sus manos y los sacrificios más seleccionados de sus promesas hechas a Hashem. Y deberán regocijarse en Ierushaláim ante Hashem, Tu Elohim: ustedes, sus hijos, sus hijas, sus sirvientes, sus sirvientas y los levitas de sus ciudades; pues ellos no tienen parte ni herencia entre ustedes. Ten cuidado de no ofrecer tus ofrendas Olá en cualquier lugar que quieras; sólo podrás hacerlo en el lugar que Hashem escoja en una de tus tribus. Sólo allí podrás ofrecer tus ofrendas Olá.
- Autorización de ingerir carne al ingresar a la Tierra Prometida: Cuando Hashem, tu Elohim, amplíe tu territorio como te prometiera o sea, cuando ingreses a la Tierra Prometida y digas: Quiero comer carne porque será tu deseo comer carne, podrás comer cuanta carne quieras. Si el lugar que Hashem elija para hacer reposar Su Nombre está distante de ti, podrás faenar del ganado mayor y del ganado menor que Hashem te diera. de la forma que Hashem te ordenó y podrás comer la carne allí donde vivas, todo lo que desees.
- Alimentos limpios e inmundos, Kashrut (Normas dietéticas): No comas ninguna cosa repugnante. Éstos son los animales que podrán comer: el toro ganado vacuno, la oveja, la cabra, la gacela, el ciervo, el antílope, la cabra montés, la gamuza, el bisonte y la jirafa. Todo animal que tenga pezuña completamente dividida en dos y que rumia, podrán comerlo. Pero no deben comer los siguientes animales, aunque sean rumiantes o tengan la pezuña hendida. el camello, la arnevet (liebre), y el shafán (conejo); pues si bien son rumiantes, no tienen la pezuña hendida, son impuros para ustedes. Tampoco el cerdo, pues si bien tiene la pezuña hendida, no rumia es impuro para ustedes. No deben comer la carne de ellos ni tocar su cuerpo muerto. De los seres acuáticos podrán comer los que tengan aletas y escamas. Pero aquellos que no tengan aletas y escamas, no los podrán comer, son impuros para ustedes. Todo ser volador puro pueden comer. Los seres voladores que no pueden comer son: el nesher (águila), el peres (buitre), el ozniá (pigargo), la raá (especie de buitre), la aiá (buitre) y la daiá (milano), y sus subespecies. Toda clase de orev (cuervo); el bat haianá (avestruz), el tajmas (lechuza), el shajaf (gaviota), el netz (gavilán), y sus subespecies. el cos (búho, lechuza o halcón), el ianshuf (búho o lechuza), el tinshemet (murciélago o cuervo), 17el kahat (pelícano), la rajama (urraca o especie de buitre) y el shalaj (cuervo marino), la jasidá (cigüeña), anafá (garza) y sus subespecies, el dujifat (especie de abubilla o de pavo real) y el atalef (murciélago o similar). Asimismo, todo insecto volador será impuro para ustedes.
- Segundo diezmo: Cada año deberás quitar el segundo diezmo de todo el producto de tu cosecha. Hashem, tu Elohim, deberás comer el segundo diezmo de tu cereal, de tu vino, de tu aceite, y los primogénitos de tu ganado mayor y menor, en el lugar que Él elija para reposar allí Su nombre es decir, en Ierushaláim. Así, aprenderás a reverenciar a Hashem, tu Elohim, para siempre. Puede ocurrir que el camino a Ierushalaim fuese demasiado largo para ti y no puedas llevar el diezmo con el cual Hashem tu Elohim te bendijo. En tal caso, si te encuentras lejos de allí del lugar que eligiera Hashem, tu Elohim, para reposar Su nombre, podrás sustituirlo, el segundo diezmo por dinero. Toma entonces el dinero en tu mano y llévalo al lugar que elija Hashem, tu Elohim.
- El año de cancelación de deudas (Shemitá, año de condonación de deudas): Al final de cada siete años deberás instituir una condonación. La condonación consistirá en lo siguiente: Todo acreedor remitirá su autoridad, respecto de la deuda, que le haya prestado a su prójimo. No deberá presionar a su prójimo o a su hermano el pago de la deuda, pues Él proclama en ese séptimo año. una condonación en honor a Hashem. Podrás cobrarle tu deuda a un no judío, pero deberás renunciar a cobrar la deuda que tu hermano te deba, no obstante, no habrá menesterosos entre ustedes, pues Hashem te bendecirá abundantemente en la tierra que Hashem, tu Elohim, te da en herencia para que la poseas. Eso es válido sólo si obedeces la voz de Hashem, tu Elohim, cuidando de cumplir todo este mandato que yo te ordeno hoy. Pues Hashem, tu Elohim, te bendecirá, tal como te prometiera; Tú prestarás a muchos pueblos, pero no tendrás necesidad de pedir prestado. Dominarás muchas naciones, más ellas no te dominarán a ti. Cuando haya un menesteroso entre ustedes, en cualquiera de tus poblaciones, en la tierra que Hashem tu Elohim te entrega, no endurezcas tu corazón ni le cierres tu mano a tu hermano necesitado.
- Jag HaPésaj (Festividad de Pésaj/Pascua): Cuida el mes de (Nisan) la primavera y entonces celebra Pésaj en honor a Hashem, tu Elohim. Pues en el mes de la primavera Hashem, tu Elohim, te sacó de Egipto por la noche. Ofrece entonces como ofrenda de Pésaj a Hashem, tu Elohim, un cordero o cabrito del rebaño. Ofrenda también animales del ganado mayor, como ofrenda Jaguigá, ofrenda Shelamim, de paz,en honor a la Fiesta, en el lugar que Hashem elija para hacer residir allí Su nombre. No ingieras jametz, productos leudados. Durante los siete días debes comer matzot (pan sin leudar) pan de aflicción o sea, que recuerda la aflicción sufrida, pues saliste de prisa de Egipto. La festividad de Pésaj (Pascua): conmemora la liberación de los israelitas de la esclavitud en Egipto. Comienza desde el 14 de Nisán, (marzo o abril). Se come matzá (pan sin levadura) en lugar de pan regular. Se evita el consumo de chametz (alimentos con levadura).
- Jag HaShavuot (La Festividad de Shavuot/Pentecostés/Semanas): Deberás contar para ti siete semanas desde cuando se empieza a segar el grano. O sea, a partir del segundo día de Pésaj, comenzarás a contar siete semanas. Y al cumplirse las siete semanas, celebrarás la Fiesta de Shavuot para Hashem, tu Elohim. Deberás presentar una ofrenda voluntaria de tu mano, proporcional a la bendición que te haya brindado Hashem, tu Elohim. Y deberás alegrarte ante Hashem, tu Elohim, en el lugar que elija Hashem para reposar allí Su nombre. Deberás alegrarte tú, tu hijo, tu hija, tu sirviente, tu sirvienta, los Levitas que vivan en tus poblaciones, el prosélito, el huérfano y la viuda que viven entre ustedes. Recuerda que fuiste esclavo en Egipto, por lo tanto cuida y cumple todas estas Mizvot. La festividad de Shavuot conmemora la entrega de la Torá en el Monte Sinaí. Se celebra 7 semanas después de Pésaj, durante 1 o 2 días, dependiendo de la tradición. Se come productos lácteos y frutas. Se decora con flores y ramas de árboles.
- Jag HaSucot (Festividad de Sucot/Cabañas/Tabernáculos): La Fiesta de Sucot (cabañas) la celebrarás durante siete días, en la época que recoges el cereal de tu trilla y el vino de tu bodega. Deberás regocijarte en tu fiesta tú, tu hijo, tu hija, tu sirviente, tu sirvienta, el Levita, el prosélito, el huérfano y la viuda, que viven en tus poblaciones. Durante siete días celebrarás una fiesta para Hashem, tu Elohim, en el sitio que elija Hashem. Hashem, tu Elohim, te bendecirá en todas tus cosechas y en todos tus emprendimientos. Entonces estarás sumamente contento. Tres veces por año deberán presentarse todos los hombres del pueblo ante Hashem, tu Elohim, en el lugar que Él elija. En la Fiesta de las Matzot (la fiesta del pan sin leudar), en la Fiesta de Shavuot, y en la Fiesta de Sucot. Pero que no se presenten ante Hashem con las manos vacías, sino cada uno con lo que pueda ofrendar, de acuerdo con la bendición que Hashem, tu Elohim, te brinde. La festividad de Sucot es una celebración hebrea que conmemora el viaje de los israelitas por el desierto después de la liberación de la esclavitud en Egipto. Se celebra durante 7 días, del 15 al 22 de Tishrei (Sep-Oct).
HAFTARÁ
La soberanía de D~osAsí dice el Señor: «El cielo es mi trono, y la tierra, el estrado de mis pies. ¿Qué casa me pueden construir? ¿Dónde estará el lugar de mi reposo? Fue mi mano la que hizo todas estas cosas; fue así como llegaron a existir», afirma el Señor. «Yo estimo a los pobres y contritos de espíritu, a los que tiemblan ante mi palabra. Pero los que sacrifican toros son como los que matan hombres; los que ofrecen corderos son como los que desnucan perros; los que presentan ofrendas de grano son como los que ofrecen sangre de cerdo y los que queman ofrendas de incienso son como los que adoran ídolos. Ellos han escogido sus propios caminos, y se deleitan en sus abominaciones. Pues yo también escogeré aflicciones para ellos y enviaré sobre ellos lo que tanto temen. Porque nadie respondió cuando llamé; cuando hablé, nadie escuchó. Más bien, hicieron lo que me ofende y optaron por lo que no me agrada». Escuchen la palabra del Señor, ustedes que tiemblan ante su palabra: «Así dicen sus hermanos que los odian y los excluyen por causa de mi nombre: “¡Que el Señor sea glorificado, para que veamos la alegría de ustedes!”. Pero ellos serán los avergonzados. Una voz resuena desde la ciudad, una voz surge del Templo: Es la voz del Señor que da a sus enemigos su merecido.
Yeshyahu [Isaías] 66:1 - 24
BRIT HADASHÁ
Las buenas relacionesPor carta ya les he dicho que no se relacionen con personas inmorales. Por supuesto, no me refería a la gente inmoral de este mundo, ni a los avaros, estafadores o idólatras. En tal caso, tendrían ustedes que salir de este mundo. Pero en esta carta quiero aclararles que no deben relacionarse con nadie que, llamándose hermano, sea inmoral o avaro, idólatra, calumniador, borracho o estafador. Con tal persona ni siquiera deben juntarse para comer. ¿Acaso me toca a mí juzgar a los de afuera? ¿No son ustedes los que deben juzgar a los de adentro? Dios juzgará a los de afuera. «Expulsen al malvado de entre ustedes».
I Corintios 5:9 - 13
En este pasaje, Rav Shaul a los miembros de la congregación de Corinto aclara una instrucción previa sobre no relacionarse con personas inmorales. Inicialmente, se explica que esta prohibición no se refiere a evitar el contacto con personas inmorales que no son parte de la comunidad de creyentes, como avaros, estafadores o idólatras del mundo en general, ya que sería imposible evitar a todas esas personas sin salir del mundo. Sin embargo, la verdadera advertencia se dirige a aquellos dentro de la comunidad que se llaman a sí mismos «hermanos» pero viven en inmoralidad, ya sea siendo avaros, idólatras, calumniadores, borrachos o estafadores. Con tales personas, los creyentes no deben ni siquiera compartir una comida.
El pasaje subraya la responsabilidad de los miembros de la comunidad de juzgar a quienes están dentro de su propio círculo, manteniendo la pureza de la comunidad. El juicio de aquellos que están fuera de la comunidad corresponde a D~os. Finalmente, el autor enfatiza la necesidad de expulsar al malvado de entre los creyentes, subrayando la importancia de mantener la santidad y la integridad dentro de la comunidad.
La reflexión que nos deja la parashá, “El Libre Albedrío”: Hashem nos da la libertad de elegir entre el bien y el mal, constantemente tenemos que tomar decisiones, debemos elegir un camino, muchas de estas decisiones incluyen dilemas morales. Hashem nos exhorta a tomar el camino correcto, a elegir el camino de la vida. El libre albedrío implica que las personas son responsables de sus acciones y decisiones. Permite a las personas crecer espiritualmente al enfrentar desafíos y tomar decisiones éticas. A elegir seguir o no seguir los mandamientos de Hashem. Si decide estar cerca de Hashem o por el contrario alejarse por una situación adversa. Las buenas o las malas decisiones afectan para bien o para mal nuestro entorno.